Ingredientes (para 3-4 personas):

• 1 baguette
• 2 cebollas dulces grandes
• 1 diente de ajo (opcional)
• 15 g harina ligeramente tostada
• 100 g queso gruyère
• 50 g mantequilla
• 65 ml vino tinto
• 30 ml coñac
• 500 ml caldo de carne
• 500 ml caldo de pollo
• Sal, pimienta negra, nuez moscada

Elaboración:

1. Pelar la cebolla y cortar en juliana bien fina (= en tiras).
2. Sazonar y pochar a fuego bajo en una cazuela amplia con la mantequilla.
3. Tras 15 minutos la cebolla debe estar blanda pero transparente.
4. Subir el fuego a medio/alto y dorar la cebolla unos 15 minutos más hasta que presente un bonito color tostado.
5. Incorporar la harina previamente tostada y mezclar bien para que no se queme.
6. Agregar el vino y el coñac y dejar evaporar completamente a fuego alto.
7. Añadir el caldo de pollo y el de carne y dejar cocer destapado a fuego medio/bajo unos 20 minutos (añadir más líquido si se queda demasiado seco).
8. Poner a punto de sal, pimienta negra recién molida y nuez moscada.
9. Verter en una sopera o en boles individuales.
10. Espolvorear con queso gruyere rallado (al gusto).
11. Colocar encima unas rebanadas de pan tostado y terminar con más queso rallado.
12. Gratinar en el horno precalentado unos minutos o hasta que el queso se funda y el pan comience a dorarse.
13. Servir a continuación y prepararse para disfrutar de una reconfortante sopa muy enriquecida. ¡Bon appétit!